Los bulbos en el otoño
En cuanto la segunda mitad del mes de septiembre asome es la hora de preparar nuestra tierra para poder plantar los bulbos de otoño, tulipanes, narcisos, azucenas, etc.
Debemos cavar el terreno unos 10 cm, así conseguiremos airear y mover la tierra. Para enriquecer el terreno echamos un poco de sustrato universal.
La profundidad varía pero entre 3 y 6 centímetros estaría bien. Los bulbos se deben plantar en grupo y en número impar (13 para los bulbos pequeños y 5 para los bulbos más grandes).
Una vez plantados, la verdad es que no necesitan muchos cuidados, mantener abonada la tierra, regar con regularidad y procurar no usar herbicidas.
Durante la floración, hay que cortar las flores marchitas unos centímetros por debajo de sus bases.
Los tulipanes, cuentan con pocos enemigos y se puede conseguir que florezcan durante varios años.
Los lirios, son preciosos, los de marzo son más pequeños que los que florean en el verano.
Jacintos, para conseguir que floreen todos los años lo mejor es plantarlos nuevos cada año.
Los narcisos, estos bulbos necesitan tener un terreno bien abonado y mucho sol.